Badía en concierto
CAPITULO
[Miguel Cantilo, Luciano Pereyra, Celeste Carballo, Airbag y el Dúo Coplanacu]
En esta emisión Badía presenta a los invitados: Miguel Cantilo, Luciano Pereyra, el grupo Airbag (Patricio Sardelli, Gastón Sardelli y Guido Sardelli), Celeste Carballo y el Dúo Coplanacu (Julio Paz y Roberto Cantos). En el living, Badía conversa con los artistas y recuerda con Cantilo un recital en el estadio Obras en 1983. Celeste Carballo se refiere a su nuevo disco: “Celeste Acústica II”. Los Coplanacu cuentan cómo viajan para sus giras y peñas. Badía menciona que Airbag comenzó haciendo tributo a The Beatles. Y Luciano Pereyra habla sobre sus próximas presentaciones en el Luna Park. Luego, en el escenario, Pereyra canta “Perdóname”. Tras el corte, los invitados continúan intercambiando anécdotas e impresiones en el living. Badía conduce a los Coplanacu para firmar el libro del programa y les muestra un tape donde aparece Susana Escribano, que cuenta una anécdota de sus inicios. Seguidamente, en el escenario, el dúo interpreta los temas: “El ripiero”, con la violinista Andrea Leguizamón, “Mientras bailas”, y, tras el corte, “Yacu chiri”. Luego, Airbag acompaña a Badía para rubricar el libro de los invitados. El conductor les muestra un tape con Porota, la abuela de los chicos, que cuenta la historia del grupo. A continuación, el grupo hace ”Quiero estar contigo” y “La partida de la gitana (si te vas)”. Tras la tanda, Celeste Carballo firma el libro del programa y recibe, como sorpresa, a Cuti Carabajal, colaborador en su último disco. Les acercan una guitarra y un bombista, y cantan el tema “Cuando seamos del amor”. En el escenario, Celeste interpreta “Es la vida que me alcanza”, junto al grupo Los Chamanes, y, tras el corte, el blues ”Desconfío”. Seguidamente, Miguel Cantilo rubrica el libro, y, en el escenario, hace “Una manera de llegar” y “Sudamérica va”. Más tarde, nuevamente en el living, Badía recuerda una anécdota sobre Luciano Pereyra en Liverpool, Inglaterra, donde supo ser un músico callejero. La producción muestra un tape de ese momento. Luego, Luciano va al escenario y canta “Sin testigos” y, tras el corte, “Así, así”. Hacia el final, Badía llama al escenario a todos los invitados que cierran con una versión conjunta de “Solo le pido a dios” de León Gieco.

